El Olentzero, es un personaje navarro de la tradición navideña vasca. Se trata de un carbonero mitológico que trae los regalos el día de Navidad en los hogares del área geográfica y cultural conformada por el País Vasco y Navarra y el País Vasco francés. Su origen está en la zona de Lesaca y se remonta a tiempos mucho más lejanos y antiguos que los de la llegada del Cristianismo.
Se representa como un hombre grueso, desharrapado, manchado de carbón y su singular característica es que vive aislado de la sociedad dedicándose a hacer carbón vegetal en el bosque y le gusta comer y beber bien.Cada invierno baja de las montañas a los pueblos. Este personaje está ubicado dentro de las celebraciones del solsticio de invierno. El cristianismo adaptó las costumbres locales anteriores a sus nuevas creencias y así el personaje Olentzero se convirtió en el anunciador de la noticia del nacimiento de Jesús. Se dota al personaje de un significado cristiano y hogareño acorde con las enseñanzas católicas.
Una de las funciones actuales del personaje es muy similar a la de los Reyes Magos o Papá Noel. Los niños escriben sus cartas al Olentzero pidiéndole regalos, se las dan a sus padres y algunos de estos regalos aparecen en sus casas el día de Navidad. En otras ocasiones son los niños los que hacen cola para entregar ellos mismos su carta al carbonero con los regalos que han pedido. Algunas localidades del País Vasco y Navarra celebran un desfile o cabalgata de Olentzero el día de Nochebuena, en la que se representa un muñeco o persona vestida de carbonero con pipa, txapela y un saco cargado de regalos para los niños.
La imagen del Olentzero es un elemento característico y frecuente en la decoración navideña de establecimientos y mobiliario urbano en el País vasco y Navarra.
El Olentzero dice a todos los niños, que estén tranquilos esta noche que se acerca y que se porten bien porque habrá regalos para todos y también carbón para los mayores que se porten mal.